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Para la Asociación Nacional de Industriales, las zonas francas y los puertos se han convertido en motores para el desarrollo de la economía en las regiones y la base de una plataforma productiva competitiva y de grandes oportunidades. Así lo expuso el presidente ejecutivo de la Andi, Bruce Mac Master, en el marco del I Congreso de Zonas Francas y Puertos, que concluyó hoy en el Hotel Hyatt en Cartagena, con la participación de empresarios colombianos y extranjeros.
“Las zonas francas son uno de los principales instrumentos de competitividad con los que cuenta Colombia desde hace algunos años, además le permiten al país ponerse al nivel de otros países en términos tributarios. Se puede decir que son oasis para la competitividad”, asegura.
En el país funcionan 40 puertos públicos y 18 privados, de los cuales 43 son multipropósitos y 33 de ellos se dedican a manejar graneles líquidos, 10 de graneles sólidos, 6 de carbón y 6 de contenedores. El sistema portuario colombiano mueve hoy 205 millones de toneladas anuales a través de todos estos terminales y un total de 16 terminales marítimos tienen igual la connotación de zonas francas. O sea que existe una relación íntima entre zonas francas y puertos.
Mac Master sostiene que esto es una demostración de que los puertos han sido uno de los mayores ejes de desarrollo para la economía nacional durante los últimos períodos. Incluso, añade, manejan altos estándares internacionales y son considerados buenos puertos en el continente. El 30% del producto interno bruto colombiano se maneja o pasa a través de los puertos y el 80% de las importaciones y exportaciones son manejados por ellos y apenas el 20% se hace vía aérea.
El vocero de los industriales dijo que para el caso de las zonas francas hay varios retos como el de la reglamentación que existe, así como su prórroga para la mayoría de ellas. En este caso, Mac Master señaló que en otras partes del mundo las concesiones para estos parques vencen en los próximos 65 años y en el caso de Colombia, algunos en el 2022 y otros en el 2024.
De acuerdo con la Cámara de Zonas Francas de la Andi, en el país operan 112 de estos parques industriales, de la cuales 13 se dedican a la agroindustria, 54 a la industria, 5 a hidrocarburos y 40 al sector servicios. En las zonas francas funcionan 960 empresas.
Las zonas francas manejan cerca de 9 millones de toneladas anuales de comercio exterior de las cuales 50 millones son movimiento de carga y el 50% de las mercancías que ingresan a estos parques es comprada en Colombia y 1.100 millones de dólares salen de los mismos luego de ser transformadas en compañías ubicadas en este sistema.
En el caso del Atlántico, el contrato de la Zona Franca Zofía, en Galapa, se vence en el 2022, ya que se fijó para 15 años, y en cuanto a la Zona Franca de Barranquilla, la más antigua en todo el país, su contrato expira en el 2024. O sea que el nuevo Gobierno debe renegociar para que haya reglas claras de juego para los inversionistas.
“Es muy importante que se produzcan las prórrogas de estas, para que tengamos la certidumbre de cómo van a existir y los inversionistas puedan saber las condiciones con las que cuenta Colombia”, subraya el vocero de la industria colombiana.
A su vez, el presidente de la Junta Directiva Cámara de Usuarios de Zonas Francas de la Andi, Diego Vargas, sostuvo que la meta de Zonas Francas y Puertos es estrechar relaciones y contar experiencias en beneficios del comercio exterior colombiano. Reveló que hoy el sistema de zonas franca generan inversiones cercanas a los 43 billones de pesos, es decir tres veces más que los compromisos que han asumido con el Gobierno para que las empresas se puedan beneficiar de estos parques industriales.
Vargas dijo que a su vez generan 260.000 empleos por las 960 empresas que están operando y eso es una demostración que el régimen franco ha sido positivo para la economía nacional.
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