Tempo de leitura: 1 minuto
Shenzhen, metrópolis del sur de China, retirará la barrera que se instaló hace más de tres décadas para señalar el límite de la Zona Económica Especial de Shenzhen. El Consejo de Estado, el gabinete chino, ha aprobado que se elimine la cerca de alambre de espino que se extiende a lo largo de más de 80 kilómetros alrededor del centro de Shenzhen con el objetivo de promover la integración.
En una directriz, el Consejo de Estado instó al gobierno de la ciudad y al de la provincia de Guangdong a que aprovechen la oportunidad para optimizar el diseño y el uso de los terrenos, mejorar el transporte público y proteger más el medio ambiente. La decisión de eliminar la barrera indica una mayor integración en Shenzhen y envía un mensaje positivo sobre el desarrollo regional, afirmaron analistas.
En 1980, las autoridades chinas formaron una zona económica especial de 327 kilómetros cuadrados en Shenzhen e implementaron allí políticas económicas preferenciales con el fin de atraer inversión extranjera e impulsar las exportaciones.
Dos años después se colocaron una barrera fronteriza y varios controles rodeando la zona. Quienes vivían fuera de la zona tenían que solicitar un permiso especial para entrar en ella. Sin embargo, el papel de la línea se ha desdibujado con el paso del tiempo, ya que los dos lados se han ido integrando.
En 2010 el gobierno central expandió la zona económica especial a toda la ciudad, de forma que la barrera dejó de tener una función real. A lo largo de los años siguientes todos los funcionarios de los puntos de control se han ido trasladando a otras unidades fronterizas.
Os comentários foram encerrados, mas trackbacks e pingbacks estão abertos.